lunes, 16 de mayo de 2011

Lunes acartonado

Me he levantado con una palabra encajada en la garganta - Dinamómetro -
No es de extrañar, suena a objeto cilíndrico y con resortes ocultos, parece que se diseñó para expandirse dentro de nosotros, atorarse y atorarnos.
Es esdrújula, cómo todos las palabras que me traen suerte en los últimos años.
Pasé todo el trayecto en el metro y en el autobús intentando expulsarla. Esfuerzos inútiles; no sé si habrá un otorrinolaringólogo especializado en atascos verbales pero si lo hay no aparece en las páginas amarillas.
Me tropecé en un pasillo con Javi Mo.

- ¿Qué tal el fin de semana?
- No sé, no me acuerdo ...

Debería haberle respondido con mímica, gesticulando y apuntando el índice a la garganta, pero no lo hice. No me apetecía añadir a mis taras censadas la de mal actor.

Y me espera un día de no fumar, de abstinencia de aguas y alcoholes, de lamentarme del marmitako que hoy no comeré.
Antes tengo que encontrar qué palabra, de todas las que reprimí en los últimos quince días, se ha metamorfoseado en dinamómetro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Díscola palabra que se ha atorado.
Díla.

Beso

S.