domingo, 2 de enero de 2011

La Osa Mayor

Estamos en Lodtz, a 121 kilómetros de Varsovia. Mangee ha comprado billetes de tren para ir a la FRONTERA., así en mayúsculas porque fronteras sólo hay una; y ése es un hecho que los satélites, los políticos y los cartógrafos ignoran. Me arrastra a un bosque de abedules, en un claro hay una caseta de troncos sin desvastar.
A la izquierda de la puerta, y sobre un tocón, hay una figurita de arcilla, Es un minotauro que con un guiño nos da la bienvenida. Agarro el pomo, pero Mangee me detiene.

- ¿No recuerdas que juraste abrazarme antes de traspasar cualquier puerta? ¿No recuerdas cuando amanecimos juntos bajo el arco de la entrada del Real Jardín Botánico?

La abrazo con mucho más que todo el cuerpo y sé que espera un beso, conoce muy bien los códigos secretos de mi cuerpo. En la única habitación de la caseta hay una mesa, dos sillas y un camastro con un colchón relleno de heno y lavanda.
Mangee se arrodilla, y con ademán de geisha me indica que me acerque. Abre su mochila, saca un paquete pesado. Lo abro ... es un revólver Nagan de 7 balas.

- ¿Para qué, Mangee?
- Guárdalo, es para que te protejas de los fantasmas que acuchillan tu sombra cuando paseas solo por los senderos que, una vez, recorrimos juntos.

Salimos, nos tumbamos sobre el musgo tibio. Contemplamos las estrellas en silencio.

- Mangee, tengo algo para ti

Abro el bolsillo lateral de mi cazadora de piloto del ejército belga y la entrego algo que ahora, y sólo ahora, sé que vino a mí, para acompañarme durante siete años, para recoger mis vivencias y preservarlas para ELLA. Es una caracola que abandonó la chepa de una ballena,
Mangee la toma con delicadeza, entorna los ojos y veo que mi regalo le calienta el corazón. Cierra la palma de la mano y me mira de una forma nueva, su mirada de gitana tiene reflejos dorados con motas esmeralda.

Y se duerme con mi pecho cómo almohada.

Alguien que la conoce muy bien me ha dicho que, al regreso de ese viaje, a Mangee le apareció una silueta de caracola en la palma de la mano.

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